No te dejo hablar.
Hablas y no te escucho.
Te escucho, pero no te entiendo.
Te entiendo, pero no te creo.
Te creo, pero no reacciono.
Si bien el diálogo no es la única manera de generar acción social justa, sí es uno de sus mecanismos centrales (especialmente en la imaginación democrática), pero no cualquier diálogo sino un diálogo en el que
No basta dejar hablar.
No basta escuchar.
No basta entender lo que escuchamos.
No basta confiar.
Es necesario actuar en consonancia con la responsabilidad ética de saber lo que los otros nos han dicho.
Parte de los compromisos que genera esta responsabilidad es la de generar, mantener y distribuir de manera justa los recursos (materiales, conceptuales, etc.) que no solo posibiliten sino propicien que callemos, hablemos, escuchemos, entendemos, confiamos y actuamos en consonancia.
¿En qué sentido se debe pensar a los conceptos como recursos hermeneúticos? Hay un sentido en el que lo son en tanto son herramientas esenciales de la interpretación: Cómo interpretemos algo dependerá de qué conceptos apliquemos, lo cual estará limitado por los conceptos que poseamos. Pero hay que tener cuidado en pensar que cómo recursos, los conceptos deben estar justamente distribuidos. Más bien, lo que debe estar justamente distribuido es el poder de dar forma a los conceptos que usamos mas que (pero no en vez de) la posesión de los conceptos. Miriam Jerade tiene razón de que se ha puesto mucha atención en la necesidad de generar los conceptos necesarios para entender experiencias que han sido excluidas de nuestros diálogos, por ejemplo, lo valioso de contar con conceptos como acoso sexual para dar sentido y comunicar experiencias que deben tomarse en cuenta en las discusiones colectivas propicias para tomar decisiones colectivas justas. Pero no basta generarlos, es necesario mantenerlos y difundirlos para que efectivamente cumplan su potencial liberador. Por eso es necesario complementar nuestra preocupación sobre cómo se forman y evolucionan los conceptos, con atención a quienes participan esta formación y evolución de los conceptos. Por eso me preocupa tanto la co-optación de conceptos, pero de eso escribiré en otro post, espero, pronto.
Parte de lo que saqué de mucho valor en escuchar a Miriam Jerade esta tarde, 26 de enero, 2022, en el Seminario de Investigadores del Instituto de Investigación Filosóficas.